Querido diario, hoy volví a llorar en una pesadilla se cumplían mis mayores miedos, además llovía y era introvertida. Querido diario, si es cuestión de confesar, creo que soy un poco paranoica muy hipertextual y casi nunca estoica. Me divierte hacerme la estúpida, jugar a veces mal y saber que no estoy loca. Según algunos soy egoísta, poco empática, insoportable y controladora; demasiado relativista, también me han asumido desconsiderada, fuera de quicio, condescendiente y manipuladora. Según algunos otros fui mala hermana, llegaron a decretarme mala amiga; que no estuve ahí cuando me necesitaron que cuando estuve era sin garantías. Me pregunto qué cosas dirán que soy en mi próxima vida. Querido diario, me encuentro siendo exhibicionista de mis propios defectos ¿querré que me contradigan, halaguen insulten o ni yo misma me entiendo? Querido diario, me dieron ganas de hacer catarsis (suele pasarme los domingos): No sé qué es el mes a mes, me sale mal el ajedrez y me enervan los suspiros. Me deprimen los boliches de día, los cafés de noche, y de chiquita seguido soñaba que me secuestraba una banda de vampiros. Mentiría si te digo que ya superé eso de despertarme con el vaso de agua vacío. Querido diario, cada vez que me hacen un reclamo siento que tengo que justificarme por demás, ¿será que me reconozco culpable o a eso le dicen tener ansiedad? Me gustaría poder ser más relajada cuando mi gato no aparece o me empieza a doler la panza. Me olvido de nombres y a veces de caras, pero nunca de quien es quien y, si me lastimaste, lo más probable es que no te lastime pero que nunca volvamos a tener lo que tuvimos en la antesala. ¡Querido diario! ¿Querer ser la única es lo mismo que ser celosa? ¿Pensabas que era zen por no tomar café y ser clara en mi prosa? ¿Llegaste a imaginarte que tu inactividad podía ser un problema? ¿Asumiste que no iba a hacerte una escena cuando me contaste que te veías con una ex de "la vuelta"? Querido diario, ¿En qué momento el mundo se transformó en un lugar en el que podés salirte con la tuya haciendo de cuenta que las cosas funcionan al revés? Y, ¿por qué nunca me avisaste que al final no había que estudiar tanto para que me vaya bien? Querido diario... El viernes me crucé a una ex mejor amiga en una fiesta. No hablamos nunca y nunca entendí bien porqué. Aunque ella no lo sepa, a veces me gustaría que vuelva. Ya sé que no entendés nada de lo que hago y que alguna vez habrás pensado que soy demasiado complicada para pasar el rato pero, ¿en algún momento se te cruzó que capáz quería algo? Querido diario, me dijeron que soy la villana de una historia mal contada y que con ese sweater me parecía a la princesa Diana. Me pareció muy lindo sin moverme demasiado nada, 1.90, buen partido y me dio la mano cuando caminamos por Blanco Encalada. Si hoy me escribiese le diría gracias por recordarme cuál es mi estándar. Ay querido diario, ¿Por qué cuando te dicen que podés hablar no tenés nada para decir si con la boca tapada te sentías capaz de predicar cualquier bobada? No sé qué hacer cuando anochece y me cancelan los planes. Tampoco qué haría si me dijesen que en 30 esté preparada. Cuando tu versión no es en la que todos creen, ¿vale la pena salir a pelearla?
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